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Wolfang Steflitsch, médico del hospital de Viena, asegura que los aceites esenciales son eficaces para prevenir infecciones respiratorias, la ansiedad o los trastornos del sueño.

Un aceite esencial o aceite etéreo es una mezcla de varias sustancias químicas biosintetizadas por las plantas, que dan el aroma característico de algunas flores, árboles, frutos, hierbas, especias, semillas y a ciertos extractos de origen animal (almizcle, civeta, ámbar gris). (Fuente: Wikipedia).

• Un aceite esencial está compuesto por casi 300 sustancias más o menos complejas que explican sus propiedades terapéuticas.
• Los compuestos volátiles de algunos aceites tienen un efecto directo sobre los microorganismos patógenos. También estimulan el sistema límbico que controla las emociones y el sistema endocrino.
• La forma más eficaz de utilizar un aceite esencial es inhalar sus vapores de la botella. También se pueden diluir unas gotas en aceite de masaje o respirar el aire de una estancia donde haya un difusor.

HAZLO EN CASA.

Un frasco y unos palitos es todo lo que necesitas para hacerte un difusor.

1. Combina aceites. Elige uno o varios aceites. Prueba, por ejemplo, el efecto de 20 gotas de eucalipto y 20 de menta para prevenir resfriados y gripes.
2. Prepara la base. Mézclalos con 50 ml de aceite de almendras y 50 ml de alcohol de 96º. Agita bien la mezcla.
3. Pon los palitos. Utiliza las brochetas de bambú que se emplean en la cocina japonesa. Corta las puntas y pon 5-6 en el bote.
4. Remuévelo. Cuando notes que el aroma decae, agita el frasco o cambia los palitos de bambú.

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