Parabenos: ¿por qué generan tanta polémica?.

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Los parabenos tienen mala fama pero, ¿esta justificada? Descubrimos la sorprendente verdad tras algunos de los primeros conservantes sintéticos del mundo.

La polémica de los parabenos surgió a raíz de una investigación realizada en 2004 por la Universidad de Reading en el Reino Unido, en la que los científicos tomaron biopsias de tumores mamarios y encontraron parabenos dentro. Este hallazgo sirvió de base para una teoría según la cual los parabenos, capaces de imitar débilmente a la hormona estrógeno, podrían alterar las hormonas y aumentar el riesgo de cáncer de mama.

Sin embargo, a pesar de que se han realizado nuevos estudios, no se han podido encontrar pruebas que confirmen esta teoría. Expertos alrededor del mundo, especialista en el cuidado del cáncer de mama, nos confirman que hoy en día no existe ninguna prueba irrefutable que sugiera que el uso de productos que contienen parabenos este directamente relacionado con el desarrollo de un cáncer de mama.

De hecho, los parabenos se han visto sometidos a testados tan rigurosos que actualmente los expertos creen que son mucho más seguros que otras alternativas sintéticas. 

De las 75.000 toneladas métricas de conservantes sintéticos que se usaron en 2015, sólo el 17% de ellos fueron parabenos. "Del otro 83% sabemos muy poco", dice la cofundadora e inventora de productos Lush Helen Ambrosen. Fijémonos por ejemplo en el formaldehído. Este gas incoloro y de fuerte olor tiene propiedades antisépticas que impiden que crezcan los microorganismos, por lo que se usa para conservar especímenes biológicos en los laboratorios. El formaldehído también se utiliza en productos de limpieza para el hogar, en cosmética, en medicina y como resina endurecedora en materiales de construcción a pesar de que, en grandes concentraciones, se ha demostrado que irrita las vías respiratorias, lo cual ha suscitado preocupación en los últimos años. Se sabe que algunos conservantes funcionan descomponiéndose hasta que liberan formaldehído en el producto.

Otra opción es la metilisotiazolinona, una sustancia antimicrobiana que se utiliza en la conservación de cosméticos, hidratantes y productos para bebé. Es menos efectiva y por ello, es necesario usar mayores cantidades, lo que aumentaría las probabilidades de la aparición de alergias en la piel.

Podría decirse que existen muy pocas alternativas a los parabenos que hayan demostrado ser seguras. Como David C. Steinberg escribió en Cosmetics & Toiletries: Preservatives for Cosmetics (1996), "el conservante ideal no existe, y probablemente no pueda existir."

Sin embargo, la Dra. Stefanie Williams, de la European Dermatology London, pone en perspectiva los parabenos y explica que "se han usado de forma segura desde hace tiempo y son muy comunes en productos para el cuidado de la piel; son conservantes bien reconocidos y no causan problemas a la mayor parte de los consumidores. En algunos casos contados, podrían generar alergias por contacto, aunque no son habituales si tenemos en cuenta su uso generalizado."

Puede que las conclusiones a las que se llegaron en aquel estudio de 2004, además la forma en la que se filtró la información y la interpretación que se le dio en los medios sociales, fue irresponsable. Todo esto le proporcionó la oportunidad a la industria para generar temor hacia un ingrediente y para vender productos que reforzaran ese miedo al usar conservantes que, en comparación, no se conocían ni se conocen suficientemente. Los parabenos se han utilizado durante mucho tiempo, no suelen generar irritación en la piel y funcionan correctamente en los productos. Sabemos realmente más sobre ellos que sobre cualquier otro conservante.

A pesar de ser sustancias seguras, si se debería reducir la cantidad de conservantes sintéticos que se usan por razones medioambientales (además de por motivos de salud). Los conservantes sintéticos disponibles en la industria cosmética, como los parabenos, impiden también que las cosas se deterioren en el medio ambiente. Cuando los utilizamos, estos terminan en los sistemas de alcantarillado, y así sucesivamente. Ingredientes como la miel a la hora de conservar productos es recomendable, no dañan el medio ambiente de ninguna manera ya que se descomponen de forma natural. Fuente: The Preservatives HandBook.

"Estoy aprendiendo a confiar en el viaje, aún cuando no lo entiendo". Mila Bron. 

GALENIKA COSMETICS.

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