Piel sensible: cuídala bien en estos meses de verano.

Photo by Yoann Boyer on Unsplash

La piel sensible hay que tratarla con mucho cuidado, mimo y delicadeza, especialmente durante los meses de invierno y verano, que es cuando las temperaturas son más extremas.

Cuando tenemos este tipo de piel, durante los meses de verano nos preocupa mucho la exposición solar. Pero olvidémonos de lidiar con el astro rey, porque no es nuestro enemigo. El sol tiene maravillosas propiedades para la salud, ya que entre otras cosas nos aporta vitamina D (esencial para el buen funcionamiento de los huesos), además de aportarnos bienestar psicológico. Por eso es bueno tomar el sol, eso sí, siempre siempre con moderación y mucha protección.

¿Broncearme es bueno para la piel?.

Tomar el sol es buenos para la salud en general, pero siempre en horas adecuadas. Ahora, estar bronceado no es sinónimo de una piel saludable, y mucho menos, aquello que oímos que broncearnos ayuda a controlar el acné y a eliminar granitos y pequeñas cicatrices, esto es un mito y nada más lejos de la realidad. Puede que al principio cree este efecto, pero al cabo de un tiempo aparece el llamado efecto rebote, que básicamente consiste en que cuando dejamos de tomar el sol la piel agredida se rebela y aparecen más granitos, imperfecciones, deshidratación, falta de luminosidad etc.

“El mejor antiaging es un buen fotoprotector”

El bronceado no es más que una respuesta de nuestro organismo a la agresión que suponen los rayos de sol para nuestra dermis.

Como ejemplo de pieles estupendas, lisas, luminosas y sin imperfecciones, es la que tienen la mayoría de las mujeres asiáticas, especialmente las japonesas y las coreanas. Eso es porque tienen una consciencia total sobre la importancia de la limpieza cada mañana y noche y, sobre todo, de protegerse cada día y sin excepción de la época en que estén.

¿Cómo debe ser la protección de la piel sensible?.

Como decíamos, las pieles sensibles tienen que tener un cuidado especial durante los meses de verano para evitar quemaduras, rojeces, erupciones, manchas, etc. Es importante recordar que la piel tiene memoria celular, así que cada agresión que haya sufrido tendrá consecuencias en un futuro.

Por lo tanto, imprescindible utilizar protección solar cada vez que salgamos a la calle y, sobre todo y muy importante, renovarla cada cierto tiempo. También es bueno utilizar gafas de sol para proteger la piel del contorno de ojos, que es la más fina y delicada del rostro. No olvidemos hidratarnos bien nuestra piel después de la exposición al sol.

Recordemos que si vamos a la playa o a la piscina tenemos que tener un cuidado extra e ir renovando la crema solar cada cierto tiempo, además de cada vez que entremos y salgamos del agua.

Nutricosmética para cuidar la piel desde el interior.

Por último, si queremos tener una piel protegida, hidratada, luminosa, y sin manchas, existen complementos nutricionales, como el Wonder Look AX 30 cápsulas, con una formulación innovadora, desarrollada para cuidar y mejorar la calidad de nuestra piel ya que ayuda a proteger nuestra piel desde el interior. Mejora sustancialmente la calidad de la piel, dándole más luminosidad, eliminando las manchas y favoreciendo la hidratación. Combate los efectos de los rayos UV y la contaminación sobre la piel.

Eso sí, siempre hay que combinarlo con el protector solar, ya que no nos tenemos que olvidar de las capas externas de la piel.

También es importante recalcar que el número de SPF no tiene nada que ver con la protección, sino con el tiempo que tiene que pasar entre aplicación y aplicación, recuerda cual es tu fototipo y que FPS (factor de protección solar) necesitas. 

Recuerda, el mejor remedio antiaging es la fotoprotección. Claudia Ochoa (Co-Fundadora de Galenika Cosmetics).

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